EEE.UU.
respalda la democracia en Latinoamérica y en el Perú
Oscar Maúrtua de Romaña*
La actual administración norteamericana
ha enviado un significativo mensaje al Perú, reconociendo que las elecciones presidenciales
en segunda vuelta han sido “libres, justas, accesibles y pacíficas, siendo un
modelo de democracia en la región”; debido a que hay, probablemente, cierta
analogía con lo acontecido en sus propios comicios a fines del año pasado,
donde se llegó a hacer acusaciones muy severas e infundadas contra el Presidente
Biden.
El bien supremo que alienta EE.UU.
es el de fortalecer en la región, la democracia, es decir, que desea contribuir
al cabal desempeño de gobernabilidad en los países latinoamericanos para lograr
el bienestar de sus pueblos.
Este pronunciamiento, producto
de reflexiones que ha hecho la propia Casa Blanca, el Departamento de Estado y
el Consejo de Seguridad Nacional, tienen en cuenta la expansión de otras
naciones que han cobrado mayor presencia, dado que la anterior gestión norteamericana
condujo a que su ausencia fuera reemplazada por fuentes de financiamiento y
cooperación de otras latitudes.
En consecuencia, el mensaje es
que somos integrantes del sistema interamericano, que se sustenta en la
democracia y sus instituciones constitucionales. Asimismo, geopolíticamente,
por la ubicación del Perú, somos un hub
comercial donde EE.UU. es el primer importador de nuestros productos a nivel
continental y el segundo a nivel mundial. Somos además socios en la OEA,
colaboramos en la ONU, integramos el APEC y se busca coadyuvar a que al Perú le
vaya bien y que la voluntad popular del soberano, el pueblo, sea respetada.
Otras consideraciones, además
de la democrática y la geopolítica, son la preocupación por el narcotráfico, las
migraciones, la cuestión ecológica, el tratamiento al capital extranjero, entre
otras. Sin duda, muestran su confianza en las instituciones del Perú, concretamente
en el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), la Oficina Nacional de Procesos
Electorales (ONPE) y el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil
(RENIEC), para que estas resuelvan ajustadas a ley, es decir, en el marco de la
plena vigencia del estado de derecho en el Perú.
A esto, se suma además el
comunicado del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de
los Estados Unidos, mediante el cual condenó la campaña de desinformación e
intentos de anular votos de las zonas rurales y pobres. También pidió respetar la
voluntad del electorado para fortalecer la democracia.
Al término de este breve
artículo, supimos, asimismo, de la presentación de un documento de “declinación
irrevocable” presentado por el representante del Ministerio Público en el Pleno
del JNE, el señor Luis Arce Córdova. Cabe precisar que de acuerdo con la Ley
Orgánica del Jurado Nacional de Elecciones, los integrantes del pleno del JNE
no pueden renunciar durante los procesos electorales, de referéndum u otras
consultas populares. En respuesta al documento del señor Arce, mediante
Resolución N° 66-2021-P/JNE, el Presidente del JNE resolvió suspenderlo en el
ejercicio del cargo de Miembro Titular del Pleno del JNE, para dar lugar a la
convocatoria del nuevo representante que provisionalmente corresponda.
***