LOS INTERESES MARÍTIMOS DEL PERÚ: ANÁLISIS Y PROSPECTIVA
Embajador Nicolás Roncagliolo Higueras (*)
En agosto del 2024, el Secretario General de la ONU, António Guterres, efectuó un llamado a mirar con atención los problemas que afronta el océano, derivados del cambio climático, la acidificación, derretimiento de los glaciares y el aumento del nivel del mar. La alerta dada por el principal funcionario de dicha organización revela que el mundo de nuestros días, en transición hacia un nuevo orden mundial, tiene al mar como escenario de la acción de los Estados y de una serie de peligros que sólo pueden ser superados mediante una mirada integral de los asuntos del mar, que dé lugar a una respuesta global.
En el último siglo, los Estados han logrado consolidar su presencia en el océano. La batalla de las 200 millas como fue denominada por el canciller peruano Carlos García Bedoya fue ganada por aquellos que -como los países latinoamericanos impulsaron el reconocimiento jurídico internacional de sus derechos de soberanía y jurisdicción sobre la zona marina adyacente a sus costas.
Considero oportuno recordar que entre la década de los años 70 y 80 se consolidó un marco normativo, auspiciado por las Naciones Unidas, destinado a regular las actividades de los Estados en el mar, logrando esclarecer de manera definitiva sus atribuciones y obligaciones. La Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar de 1982 (CONVEMAR), es la expresión concreta y más importante de dicho marco. Este instrumento internacional, luego de 40 años de existencia, ha conseguido una aceptación casi planetaria, la consolidación de sus instituciones como es el caso del Tribunal del Mar o la Autoridad de los Fondos Marinos, así como una legitimidad en el tiempo.
Actualmente, es considerada como la norma fundamental de aplicación a las relaciones estatales en el mar y la mayor parte de sus normas forman parte del Derecho Internacional consuetudinario. Este año se cumplen 30 años de su entrada en vigor, en 1994. Los alcances de su texto no solo garantizan los derechos de los Estados sobre sus 200 millas, sino también el alcance de los intereses estatales en otros espacios como son la Alta Mar y la Zona Internacional de los Fondos Marinos, que constituyen los pilares del nuevo Derecho del Mar cuya principal contribución provino del Perú, acompañado de Chile, Ecuador y Colombia, integrantes de la Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS).
Es indudable que en las últimas décadas se vive un tiempo intenso de comercio marítimo que interconecta al mundo, de la necesidad de construir puertos de aguas profundas como el de Chancay, de la gestión sostenible y explotación de recursos hidrobiológicos, así como del combate a las actividades que ilegalmente los ponen riesgo, de la ampliación de las plataformas continentales hasta las 350 millas. También de asuntos novedosos como el interés por los recursos genéticos provenientes del océano, de la biodiversidad marina, de la descarbonización y la protección del medio marino, de las organizaciones de regulación pesquera en alta mar, de la atención por los recursos mineros de los fondos marinos, del desarrollo rápido de la ciencia y tecnología oceánicas. Asimismo, existe ya una jurisprudencia en materia de temas marinos, producida en el seno de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y el Tribunal del Mar. Y finalmente, existen nuevos tratados internacionales, como el reciente Acuerdo sobre la Conservación y Uso Sostenible de la Biodiversidad Marina más allá de las Jurisdicciones Nacionales (BBNJ) del 2023 o procesos de negociación como el que tiene lugar hoy para aprobar un acuerdo global contra la contaminación por plásticos en los océanos.
En ese contexto, la revista digital Faro Diplomacia y Relaciones Internacionales y la Sociedad Peruana de Derecho Internacional han organizado el conversatorio “Intereses Marítimos del Perú. Análisis y Prospectiva”, el 28 de noviembre, en la Municipalidad de Miraflores, para examinar en una perspectiva actualizada de los intereses de nuestro país en el mar, hacia la determinación aún pendiente de la adhesión del Perú a la CONVEMAR, también conocida como la “Constitución de los Océanos”.
(*) Director de la Revista digital Faro Diplomacia y Relaciones Internacionales y Miembro Titular de la Sociedad Peruana de Derecho Internacional.
